Me piden desde una institución que diga en una página qué aportan las ciencias sociales al estudio de los trastornos alimentarios. Aunque no estoy seguro de haberlo logrado, quizá lo que he mandado le sea útil a algún colega. (Artículo en La Voz ) El estudio de los trastornos alimentarios, en ciencias sociales, propone una cuádruple aportación (que he desarrollado en Moral corporal, trastornos alimentarios y clase social , Madrid, CIS, 2010). Veamos en qué: 1. En primer lugar, no asume como evidentes las diferencias entre salud y enfermedad: por la simple constatación de que lo que se considera sano en un contexto social o en un momento histórico, puede ser considerado patológico en otro. La exploración sistemática de esos diversos umbrales de sensibilidad en el pasado o en el presente proporciona indicadores precioso de cuáles son las acciones que provocan malestar en los sujetos y en su entorno. Para comprender esas acciones y qué en ellas resulta dañino, tanto para la pers
"Huíd de escenarios, púlpitos, plataformas y pedestales. Nunca perdáis contacto con el suelo; porque sólo así tendréis una idea aproximada de vuestra estatura." Juan de Mairena/Antonio Machado