El libro V de La República propone una lección de epistemología política. Nuestro mayor problema, dice Sócrates, consiste en agrupar a individuos en clases que no les convienen. Y no les convienen, puede ser, porque no son semejantes a aquellos con los que se les agrupa o, también puede ser, no son distintos de quienes se les separa. Encontrar la diferencia relevante es el gran problema epistemológico al ordenar las cosas del mundo, en el sentido del conocimiento, pero también ordenarlas en el sentido político. La diferencia sexual existe, admite Sócrates, pero no puede utilizarse como calco para establecer la diferencia entre ocupaciones. Se pueden predicar ideas muy generales sobre los oficios que convienen a las mujeres, pero tales ideas muy pronto se encuentran relativizadas por múltiples excepciones. Entre las mujeres existen diferencias de vigor, de talento y de vocación variadas. Si, en lo que concierne al vigor, las medimos con el varón más fuerte, quedan en desventaja
"Huíd de escenarios, púlpitos, plataformas y pedestales. Nunca perdáis contacto con el suelo; porque sólo así tendréis una idea aproximada de vuestra estatura." Juan de Mairena/Antonio Machado