La exigencia fenomenológica de descripción se aplica contadas veces a las ceremonias filosóficas. Este comentario que envía Carlos Calvo Varela (estudiante de filosofía en Santiago) es una excepción. Sirva de ejemplo. Lo que primero me llamó la atención fue la distribución en el espacio de los profesores asistentes a la charla. En las asambleas de estudiantes es bastante frecuente que los grupos que intentan hegemonizar el encuentro se distribuyan por la sala ocupando todos los ángulos para dar sensación de multitud. Casi como la clásica formación del fútbol de principios de século, em WM. El profesorado de la facultad, si bien se distribuyó exactamente de esta manera, la intención era totalmente distinta. Los grupos de estudiantes que quieren controlar la asamblea buscan con esa distribución crear una red con la que “pescar” el auditorio. Los profesores querían reservarse su parcela de individualidad: no querían compartir con nadie su participación de lo sagrado (el profesor Hinske, e
"Huíd de escenarios, púlpitos, plataformas y pedestales. Nunca perdáis contacto con el suelo; porque sólo así tendréis una idea aproximada de vuestra estatura." Juan de Mairena/Antonio Machado