Si bien es un concepto que ya
tenía una historia intelectual previa, reflexionar sobre la explotación
implica, de alguna manera, repensar, dialogar y actualizar el proyecto que Marx
tenía en mente en El Capital. Este
monográfico propone identificar qué hay de específico en las formas de
explotación actuales y cómo actualizar la concepción clásica del concepto a luz
de las transformaciones del capitalismo contemporáneo. Marx hablaba de
dominación, desposesión y explotación para configurar todo un cuadro de formas
históricas que podía adquirir la explotación en el seno de una sociedad
incipientemente industrializada. En un escenario como el actual, ¿qué formas
puede adoptar hoy la explotación? Pensar la explotación bajo las articulaciones
entre exclusión, alienación, dominación y acumulación, plantea un programa de
trabajo epistémico de primer orden en un mundo en el que identificar las
fuentes de explotación y sus efectos es una tarea más compleja si cabe que
cuando fue enunciado el concepto. ¿Bajo
qué formas aparece hoy la explotación? ¿Qué relación establece con otros
conceptos como la dominación, la exclusión o la desposesión? ¿Puede pensarse el
concepto como extensible a otras esferas, por ejemplo, la política? En resumen, ir más allá del concepto tal y
como aparece concebido en El Capital obliga a pensar distintas variables
que el propio Marx no tuvo en cuenta u otorgó un carácter secundario que con
las transformaciones del capitalismo contemporáneo han adquirido un rol
principal. Pensemos, por ejemplo, en que uno de los grandes olvidados del
proyecto moderno como el trabajo reproductivo; pensemos no sólo en la
tradicional la explotación de los asalariados por los no asalariados, sino
también en la explotación entre asalariados; pensemos en la centralidad del
sector servicios, ligado con esto último (pero no solo), pensemos en cómo opera
la explotación en los cuerpos y en qué normatividad impone y; por último, en
qué resistencias pueden articularse a la explotación hoy día.
Además, el concepto de
explotación ha dado lugar a importantes estudios sobre formaciones sociales
precapitalistas cuyas dinámicas pueden pervivir en las nuestras.
Para concluir, la explotación
sirve para aclarar procesos que desbordan la producción de bienes y servicios y
que incluyen las relaciones espacios domésticos y políticos, incluso
culturales.
Este monográfico se organiza en
el marco de la Cátedra Extraordinaria
Filosofía Social de la Discriminación Corporal (UGR-Inmujeres)
La revista Sociología Histórica hace un llamamiento a la comunidad de las
ciencias sociales e históricas para la recepción de artículos que den cuenta de
las vinculaciones entre cuerpo y explotación desde una doble perspectiva:
1º) Debates conceptuales y
empíricos, preferiblemente vinculados, sobre cómo se piensa actualmente la
explotación del cuerpo con sus vinculaciones de género, clase y raza.
2º) Análisis de las experiencias
de explotación en las relaciones sociales, concibiendo la explotación en un
sentido que rebasa las relaciones laborales e incluye las relaciones
domésticas, políticas y culturales.
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Coordinadores:
Pablo Beas Marín
(pbeas@correo.ugr.es)
José Luis Moreno Pestaña
(jlmorenopestana@ugr.es)
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